Se realizó entre 2005 y 2007; auspiciado por la Fundación Hewlett.
Buscó estrategias para que comunidades marginadas utilizaran el derecho de acceso a la información en su beneficio.
Participaron 20 organizaciones civiles de nueve entidades de la República Mexicana.
Sus resultados fueron evaluados por la UNAM: se logró identificar elementos útiles para desarrollar estrategias que faciliten a las comunidades marginadas contar con los recursos humanos y técnicos necesarios para hacer uso de los procedimientos de acceso a información pública.
Muchas personas, organizaciones e incluso personal de los tres niveles de gobierno desconocen o no ejercen el DAI.
Los resultados obtenidos muestran la necesidad de promover el ejercicio de este derecho, incorporando a nuevos actores que aprendan a utilizarlo en su beneficio.